"Para caminar valen los sueños.
Y no me quedan más.
Llévame a hombros."
Dispárame en el alma, como tú sabes. Con esos ojitos.
Y cuando no mire, quiéreme. Y cuando mire, huye a otros abrazos.
Busca otros labios.
(Ansía los míos)
Encuéntrame como cuando te diste por vencida.
Entiendo que no quieras quererme. Entiendo que me necesites.
No me entiendes. Cuando te quiero. Aquí.
No me entiendo, pero. Este agujero en el pecho lo llenas con cada una de tus miradas furtivas.
Y esta vez sí que no voy a escaparme. Me até a tus labios; sin rozarte. Sin hacerte daño.
Joder.
Bésame.
No me quieras.
Seguramente esto acabe en otro fracaso, pero esta vez no me importa. Me importas.
No escribo. Te escribo.
No queda mucho para necesitarte.
Y demasiadas confesiones tengo pendientes con tu almohada.